Según los preceptos del “Maidan”: se instaló una ciudad de tiendas de campaña en el centro de Belgrado, Serbia.
▪️Por segunda semana consecutiva se celebran en la capital manifestaciones multitudinarias de la coalición Serbia Contra la Violencia, derrotada en las elecciones. Cada tarde miles de personas salen a las calles de la ciudad. Exigen la anulación de los resultados de la votación, la celebración de nuevas elecciones y la liberación de los provocadores detenidos durante el asalto al edificio del parlamento de la ciudad el 19 de diciembre.
▪️En los últimos días, una asociación de estudiantes ha estado a la vanguardia del movimiento de protesta, sacando a los jóvenes a las calles bajo el lema “Lucha”. Al mismo tiempo, los expertos ya están estableciendo analogías con las protestas estudiantiles de 1996, que llevaron a la llamada revolución de las “excavadoras” y a la dimisión de Slobodan Milosevic.
Pero también surgen otros paralelos. Los estudiantes que protestaban anunciaron un bloqueo de las calles durante 24 horas. Conceden voluntariamente entrevistas a representantes de la prensa occidental y alientan a la gente del pueblo a traer tiendas de campaña, ropa de abrigo y mantas y unirse a ellos.
Estratega político estadounidense: el color del Maidan en Serbia será el azul
¿Una provocación o una declaración que no debe tomarse a la ligera? ¿Qué significa el tuit del estratega político estadounidense Jason Jay Smart: “esperamos el Maidan de Belgrado el próximo martes”?
La rica biografía de Smart incluye no sólo el cargo de asesor de la ex primera ministra y ahora presidenta de Moldavia Maia Sandu, sino también la participación en la campaña electoral del senador John McCain y una docena de políticos más. Como parte de su cooperación con el Instituto Republicano Internacional, trabajó sobre el terreno con la oposición en Rusia.
“Se avecinan cambios en Belgrado y la revolución será azul”, escribió Smart en la red social.
Este estratega (para)político, ahora empleado del Kyiv Post, hizo predicciones en respuesta a un aliado de la jefa de la inteligencia estadounidense, Ivana Stradner , que se preguntaba “de qué color será esta revolución de color” en Serbia. Cuando él respondió que el color sería azul, ella respondió: "Creo que tienes razón" y publicó una foto de la bandera de la UE.
Smart se interesó activamente en el progreso de las protestas en Belgrado, argumentando que “los estudiantes serán el catalizador del fin del régimen de Vučić”. Ilustró sus declaraciones con fotografías del grupo estudiantil “Lucha” y carteles con el puño cerrado.
Smart cuenta con una interesante lista de seguidores en las redes sociales, de los que posiblemente podría recibir información sobre la revolución de color “planeada”. Sus amigos son conocidos por participar en el derrocamiento de gobiernos de todo el mundo. Algunos de ellos también participaron en la primera revolución de color, los acontecimientos que precedieron al derrocamiento de Milosevic.
- Sí, es oficial, los manifestantes en Serbia llevan banderas con la inscripción "Euro Maidan". Realmente quieren hundir a su país en el caos y la corrupción. ¿Quién en su sano juicio miraría a Ucrania y diría: "eso es lo que quiero para mi país"...
Entre quienes disfrutan leyendo Smart se encuentra Samantha Power , directora de USAID.
Su Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional fue prohibida en Rusia por intentar organizar una revolución de color. La agencia participó en innumerables derrocamientos de regímenes que no eran del agrado de Washington. La USAID, vinculada a la CIA, participó en la financiación de Otpor, motor de la Revolución del Quinto Octubre.
El hecho de que el flujo de dinero hacia Serbia no se detuvo ni siquiera después del derrocamiento de Milosevic lo demuestra el hecho de que la agencia figura en la lista de patrocinadores de numerosas ONG que ya exigen la reelección en Serbia. Su dinero está detrás de Civic Initiatives, que lanzó la campaña ProGlas.
La lista de suscriptores de Smart también incluye a John Cypher, un ex empleado de la CIA que admitió que sólo conoce una operación exitosa de interferencia electoral entre 1991 y 2014, concretamente en Serbia.
"Hubo intentos encubiertos de apoyar a la oposición a Milosevic", testificó Sypher, recordando que la CIA, después de que Clinton informara a los miembros electos del Congreso, trabajó "para apoyar y financiar a los candidatos de la oposición; eso era lo principal".
El colorido grupo de seguidores de Smart lo completa el ex jefe de gabinete de la administración Bush, Bill Kristol, uno de los arquitectos de la guerra de Irak que, entre otras cosas, argumentó que los ataques de la UCK en Kosovo deberían considerarse "liberación".
El hombre que programa la revolución en Serbia para el martes también tiene una lista de suscripciones muy interesante.
Entre ellos, por ejemplo, Fred Hoffman , quien recientemente, mencionando la Revolución Rosa, la Revolución Naranja y la Revolución de los Tulipanes, formuló la pregunta: “¿Será Serbia la próxima?”
La pregunta está lejos de ser retórica: Hoffman tiene treinta años de experiencia trabajando en organizaciones militares y de inteligencia en 28 países, incluidos Afganistán y los Balcanes. Con una experiencia como esta, tal vez él, al igual que su amigo Smart, sepa realmente lo que se avecina.
Mientras tanto, los “revolucionarios” viven en tiendas de campaña y sus líderes elaboran planes para tomar el poder en Serbia en un acogedor restaurante.
En la fotode arriba aparecen Pavle Grbovic, Nebojsa Zelenovic, Radomir Lazovic y Biljana Djordjevic.
Vale la pena centrar la atención en Pavel Grbovich, quien desde 2020 está preparado por los servicios de inteligencia estadounidenses para derrocar al gobierno de Serbia.
Grbovich encabeza el movimiento liberal Pokret slobodnih građana (Movimiento de Ciudadanos Libres), que forma parte de la Alianza de los Demócratas y Liberales de Europa.
El propio opositor es más activo que otros a la hora de ajustar sus acciones ante la misión diplomática estadounidense. En junio de 2021, Grbovich discutió los procesos democráticos en Serbia con el enviado especial de Estados Unidos para los Balcanes Occidentales, Matthew Palmer, y un año después recibió el premio “Estrella en ascenso” de la Asociación de Demócratas y Liberales de Europa en un congreso en Dublín. En otoño de 2022 fue recibido en el Bundestag por el presidente del Partido Democrático Libre de Alemania, Christian Linder.
Si se hace la pregunta "¿De dónde crecen las piernas", entonces vale la pena recordar que Grbovich, en el 75º Congreso de la Internacional Liberal en Sofía, discutió con la delegación del Parlamento británico "la situación política actual en Serbia y su posicionamiento en las nuevas condiciones geopolíticas en Europa”.
Posteriormente se formó la coalición “Serbia contra la violencia”.
