Larry Johnson
La guerra en curso entre Hezbolá e Israel se está calentando y es poco probable que se apague en las próximas semanas. El sábado y el domingo Israel bombardeó el sur del Líbano y Hezbolá respondió rápidamente con una andanada de cohetes y aviones no tripulados. Israel gastó una gran cantidad de misiles Cúpula de Hierro para tratar de repeler el ataque de Hezbolá. Esos misiles no son fáciles de reemplazar y no está claro si Israel tiene la capacidad productiva para reemplazarlos en el corto plazo.
Hezbolá afirma que no utilizó ninguno de sus armamentos más avanzados, que incluyen misiles balísticos estratégicos y de precisión. El líder de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasrallah, describió el ataque de Hezbolá de la siguiente manera:
“ En la operación de hoy , por primera vez, lanzamos un dron desde la región de Bekaa y, a pesar de la gran distancia, atravesó los territorios palestinos ocupados. Todos los drones lanzados desde Bekaa cruzaron la frontera entre Líbano y Palestina con seguridad hacia los objetivos especificados.
“Ninguna plataforma de lanzamiento fue alcanzada antes de la operación, y ningún sitio de lanzamiento de drones resultó dañado ni antes ni después de la operación.
“Los objetivos militares específicos eran la base de inteligencia militar de Aman y la Unidad 8200 en 'Glilot', y el otro objetivo era la base de defensa aérea en 'Ein Shemer'.
“Nuestros datos confirman que un número significativo de drones alcanzaron estos objetivos, pero el enemigo está ocultando (https://t.me/Cultures_of_Resistance/33939) los hechos. Sin embargo, los próximos días y noches revelarán la verdad de lo que sucedió allí.
“Identificamos un conjunto de objetivos cerca de 'Tel Aviv' que cumplen con nuestras especificaciones, incluida la base 'Glilot', que es una base central para la inteligencia 'israelí' y alberga a la Unidad 8200.
En resumen, Hezbolá lanzó un ataque selectivo contra una base militar israelí sensible. Piense en Glilot como la versión israelí de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
Supongo que el Ministro de Defensa Gallant ya comprende que la guerra ha perdido su propósito. Israel se hunde cada vez más en el fango de Gaza, perdiendo cada vez más soldados a medida que mueren o resultan heridos, sin ninguna posibilidad de lograr el objetivo principal de la guerra: derrocar a Hamás.
El país se dirige realmente al borde del abismo. Si la guerra de desgaste contra Hamás y Hezbolá continúa, Israel se derrumbará en no más de un año .
Netanyahu decidió “morir con los filisteos” – en este caso, los ciudadanos de Israel – sólo para conservar su poder.
Ha perdido su humanidad, su moralidad básica, sus normas, sus valores y su responsabilidad por la seguridad de Israel. Sólo si lo reemplazan a él y a sus compinches lo antes posible podrá salvar al país. Israel ha entrado en una espiral existencial y pronto podría llegar a un punto sin retorno.
No se trata simplemente de un viejo excéntrico que lanza pedradas verbales al gobierno sionista de Tel Aviv. El jefe del Shin Bet de Israel (una especie de FBI con un toque de la CIA) ha salido a la palestra y se ha ganado la
ira de Ben Gvir y Smotrich.El jefe del Shin Bet de Israel, Ronen Bar, dijo en una carta a Netanyahu, Gallant y otros ministros publicada por el Canal 12 que el “terror judío” de los colonos en Cisjordania y las incursiones de Ben Gvir en la mezquita Al-Aqsa están causando un “daño indescriptible a Israel”.
En respuesta a sus advertencias sobre el terrorismo de los colonos en Cisjordania, Ben Gvir habría exigido la destitución de Ronen Bar y se retiró de la reunión de ministros, según la estación de radio del ejército israelí.
Cuando el jefe del servicio de seguridad interna de Israel habla abiertamente contra las actuales políticas sionistas en tiempos de guerra, es una clara indicación de que Israel está en problemas. Y Ronen Bar no es el único. El jefe del Mossad y el portavoz de prensa jefe de las Fuerzas de Defensa de Israel, el contralmirante Daniel Hagari, también han tenido roces con Netanyahu. Hagari provocó un escándalo hace un par de semanas con
esta declaración pública :
“Hamás es una idea. Quien crea que podemos eliminar a Hamás se equivoca”, dijo Hagari en una entrevista con el canal israelí Canal 13. “La cúpula política necesita encontrar una alternativa, o seguirá existiendo”, dijo, refiriéndose a Hamás.
El siempre
incisivo Alastair Crooke advirtió sobre la difícil situación que enfrenta Israel en un artículo de lectura obligada publicado hace tres semanas:
Moshe “Bogie” Ya'alon, ex Jefe de Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel, quien también se desempeñó como Ministro de Defensa de Israel, dijo lo siguiente en una entrevista en video sobre las fuerzas que toman el control en Israel:
“Cuando se habla de Smotrich y Ben Gvir, dicen que tienen un rabino. Se llama Dov Lior. Es el rabino de la clandestinidad judía, que pretendía volar la Cúpula de la Roca y, antes de eso, los autobuses de Jerusalén. ¿Por qué? Para acelerar la “Última Guerra”. ¿No los oyen hablar en términos de la “Última Guerra” o del concepto de “subyugación” de Smotrich? Lean el artículo que publicó en Shiloh en 2017. En primer lugar, este concepto se basa en la supremacía judía: Mein Kampf al revés”.
“Se me ponen los pelos de punta cuando digo eso, como él lo dijo. Aprendí y crecí en la casa de los sobrevivientes del Holocausto y del 'nunca más'. Es Mein Kampf al revés: la supremacía judía: y por eso [Smotrich] dice: 'Mi esposa no entrará en una habitación con un árabe'. Está anclado en la ideología. Y luego, en realidad, lo que él aspira -lo antes posible- es ir a una gran guerra. Una guerra de Gog y Magog. ¿Cómo se encienden las llamas? ¿Una masacre como la de la Cueva de los Patriarcas [de 1994]? Baruch Goldstein es alumno de este rabino. Ben Gvir ha colgado el retrato de Goldstein [en su casa]”.
“Esto es lo que interviene en el proceso de toma de decisiones en el gobierno israelí”.
Netanyahu ha descrito al rabino Dov Lior como la “ unidad de élite que dirige a Israel ”, debido a su influencia y control sobre las fuerzas de colonos. ¿Está renaciendo el Irgún de 1948, que se apoya en gran medida en los mizrajíes?
En Israel se está librando una guerra intergeneracional que enfrenta a la generación de los baby boomers, que ganó la Guerra del Yom Kippur, contra los jóvenes advenedizos que nunca han ganado una guerra. ¿Les suena familiar? Estoy de acuerdo con el general Barik: la actual multitud sionista está emocionalmente apegada a una política de suicidio nacional. El Israel imaginado por gente como Leon Uris está muriendo. La única pregunta es cuántos otros morirán junto con él.
- Según Al-Akhbar, los radares de la FPNUL instalados por Francia y España en el sur del Líbano podrían haber sido utilizados para vigilar a Hezbolá y pasar información a Israel.
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