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En un escandaloso informe, el CNI persigue las ideas antiglobalistas en un trabajo sobre Vox. La pregunta es ¿para quién trabaja el CNI?

Por Elespiadigital
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infoelespiadigitales/4/4/19
miércoles 14 de octubre de 2020, 14:52h

Impresentable, peligroso y una prueba material de que el CNI debe ser depurado hasta sus cimientos y que los responsables sean pasados por los tribunales.

OKDiario ha dado a conocer un escandaloso informe del Centro Criptológico Nacional -coordinado con el CNI- sobre “desinformación” en el que califica de «contrario a las instituciones democráticas» y «una amenaza directa» la crítica al globalismo: Vox es el principal partido que ha incluido este punto en su ideario. Lo ha defendido todo el partido con Santiago Abascal a su cabeza.

Criticar al globalismo y sus subproductos ideológicos entra dentro de los derechos fundamentales de cualquier ciudadano en un país democrático y es repugnante que unos personajes amparados en su naturaleza secreta y a los que se paga la nómina con el dinero de todos los españoles vengan a tachar esa narrativa como de «naturaleza antisistema», contraria «a las instituciones democráticas y pueden suponer una amenaza directa para la cohesión social, la estabilidad, incluso la salud del país».

El informe aparece elaborado con fecha del pasado 30 de septiembre. Lo ha desarrollado el ‘Observatorio Digital Elisa. Laboratorio para el Análisis de la Desinformación (Antiglobalismo)’. Y carga contra las tesis que critican el avance de unas «élites globales» que se superponen a los países por ser una de las «narrativas maliciosas más frecuentes».

El texto del documento del centro que coordina del CNI destaca que «a continuación, se detallan las narrativas maliciosas más frecuentes, según las fuentes digitales potencialmente maliciosas, analizadas por el ‘Observatorio Digital Elisa’, tanto en España como en el extranjero». La primera es el «Antiglobalismo».

Curiosamente, el informe es un calco –casi un corta y pega, es que no se da para más…- de las intoxicaciones a las que nos tiene acostumbrado el Instituto Elcano y los agentes extranjeros como Stratfor y Nicolás de Pedro al frente, todos siguiendo la estela de los neocons norteamericanos escondidos en sus madrigueras, principalmente el Atlantic Council, la OTAN y los servicios secretos británicos.

Seguridad de las tecnologías

Los españoles pagan el sueldo de estos anacletos para cumplir con la Ley 11/2002, de 6 de mayo, reguladora del Centro Nacional de Inteligencia, que encomienda al CNI el ejercicio de las funciones relativas a la seguridad de las tecnologías de la información en su artículo 4.e), y de protección de la información clasificada en su artículo 4.f), a la vez que confiere a su secretario de Estado director la responsabilidad de dirigir el Centro Criptológico Nacional (CCN) en su artículo 9.2.f). De ese modo surge el CCN como brazo del CNI.

«Como desarrollo de esta Ley, y partiendo del conocimiento y la experiencia del CNI sobre amenazas y vulnerabilidades en materia de riesgos emergentes, se creó en el año 2002 el CCN, regulado por el Real Decreto 421/2004, de 12 de marzo», señala la propia documentación del CNI.

Pero en vez de servir al Estado y a los españoles, el informe se dedica a chotear que «las narrativas antiglobalistas tienen una naturaleza antisistema contrarias a las instituciones democráticas y pueden suponer una amenaza directa para la cohesión social, la estabilidad, incluso la salud del país. La crisis de la Covid-19 ha favorecido un gran crecimiento de estas narrativas, así como de las fuentes digitales que difunden este tipo de contenidos. Sólo entre el mes de abril de 2020 y septiembre de 2020, el ‘Observatorio Digital Elisa’ ha detectado 1.808 contenidos antiglobalistas difundidos en 157 plataformas». Solo les falta decir que detrás está la mano de Putin…

Al servicio de unas élites ocultas

El informe del CNN añade que «su núcleo principal consiste en afirmar que las democracias no obedecen a las necesidades de los ciudadanos, sino que están al servicio de unas élites ocultas que son las que toman las decisiones, ajenas a la voluntad de los mismos. Buscan culpar a un enemigo externo (imaginado e imaginario) de los problemas sociales, políticos o económicos que afectan a un país». Se ve que los anacletos no escuchan lo que la gente dice por los bares, las empresas o las aulas…

 

¿Por qué señalan a Vox? Según la “inteligencia”, porque en innumerables ocasiones Vox ha señalado a la figura de George Soros como protagonista clave de este globalismo. «Esta narrativa, que las plataformas maliciosas defienden sin aportar ninguna evidencia, es la base ideológica sobre la que se asientan los movimientos políticos de polarización que están surgiendo en Europa y Estados Unidos, y que plantean como retórica ‘recuperar’ la soberanía de los Estados con agendas políticas nacionalistas e identitarias», subraya el documento del CCN.

De verdad… ¿Se han atrevido a poner tal cosa en un informe oficial? ¿Tan patéticos son para hacer oficial la narrativa de los poderes globalistas?

Concluye afirmando que «su naturaleza es antisemita, (no se rían, por favor) puesto que de manera sistemática vinculan al ‘lobby judío’ intereses ocultos (George Soros o la familia Rothschild e incluso a Bill Gates). Quizás nos quieren avisar de que estos oligarcas no son criticables… Lobbistas conocidos y reconocidos en el mundo y de los que hay suficiente información accesible para conocer su naturaleza de exponentes del gran capital de intereses geopolíticos muy evidentes. Y por otra parte… ¿hay algún partido que sea más proisraelí que Vox? ¿Es que no lo sabe el CNI? ¿Pero qué chapuza de servicio de inteligencia tenemos?

Pero lo mejor, lo que hace impagable el informe, lo que deja en un ridículo espantoso un servicio que nos cuesta mucho dinero y que ha sido incapaz de adelantarse a UNO SOLO de los acontecimientos trágicos que ha sufrido España es cuando afirman que estas narrativas son hostiles a seis principios básicos de la democracia: La legitimidad de los Estados, el pluralismo social, la economía de mercado, los medios de comunicación tradicionales, los organismos multilaterales, y la investigación científica». La “economía de mercado” (Pobre Podemos), los medios de comunicación “tradicionales” (es decir, los financiados por los poderes globalistas), los “organismos multilaterales”... ¿La ONU no es criticable? ¿Ni la OMS? ¿O los corruptos de la OPAQ? ¿O los criminales de la OTAN? Para ser un “servicio secreto” se les ve mucho la pluma y el plumero… ¿Para quién trabaja realmente el CNI?