Tony Cartalucci*
Como parte de un esfuerzo mayor y concertado para rodear y contener a China, los medios de comunicación occidentales emprendieron una campaña de desinformación en curso contra la gran ola de construcción de infraestructura global de Beijing conocida como Belt and Road Initiative (BRI).
Un ejemplo reciente y particularmente espantoso de esto proviene de un artículo de Business Insider titulado: " Este mapa muestra un billón de dólares por los que China está oprimiendo a más de un millón de musulmanes ".
El artículo ha sido distribuido ampliamente por los frentes financiados con fondos occidentales citados en el artículo, incluido Human Rights Watch (HRW), cuyo director ejecutivo, Kenneth Roth, afirmaría en una publicación en redes sociales :
La detención masiva de musulmanes uigures en China está impulsada [no] solo por la islamofobia, sino también por la centralidad de su región de Xinjiang a la Iniciativa Belt and Road de China.
Las afirmaciones de que la política china está "impulsada por la islamofobia" son particularmente absurdas. El aliado y socio más cercano de China en la región es Pakistán, una nación indudablemente de mayoría musulmana. Roth nunca explica por qué la "centralidad" del BRI impulsaría las "detenciones masivas" en Xinjiang cuando los proyectos de infraestructura de China en otros lugares, tanto dentro de China como en el extranjero, incluso a través de la mayoría musulmana de Pakistán, no presentan ni requieren tales "detenciones".
Claramente, algo falla en Business Insider, Human RightsWatch y el resto de la narrativa de Xinjiang de los medios occidentales. El artículo de Business Insider afirma:
Beijing ha estado tomando medidas enérgicas contra la vida de los uigures en Xinjiang. Los funcionarios dicen que su represión es una operación antiterrorista necesaria, pero los expertos dicen que en realidad es para proteger sus proyectos BRI.
Estos "expertos" nunca explican por qué los funcionarios de Beijing sentirían la necesidad de "proteger sus proyectos BRI". Tampoco explican de quiénes necesitan protección. La explicación obvia es, de hecho, que, como ha declarado Beijing, Xinjiang se enfrenta a una importante amenaza terrorista.
Sin duda, una minoría entre la población uigur de Xinjiang se ha radicalizado y ha llevado a cabo numerosos ataques terroristas de alto perfil no solo en Xinjiang, sino en toda China en los últimos años.
Un artículo de Reuters publicado por Business Insider en 2014 titulado, “ Atacantes que empuñan cuchillos en la estación de tren china deja 27 muertos y 109 heridos ”, detalla uno de los muchos ataques llevados a cabo por extremistas uigures.
Un artículo de Reuters de 2015 también publicado por Business Insider confirma que los atacantes eran en realidad terroristas uigures. La estación de trenes ubicada en Kunming está a más de 2,000 millas de la región de Xinjiang, lo que ilustra el alcance de la amenaza terrorista con la que se enfrenta Pekín.
A pesar de estas admisiones previas, bien conocidas, publicadas por Business Insider, la plataforma de medios de comunicación, así como muchas otras, junto a frentes como HRW finge sin saberlo la verdadera preocupación hoy de seguridad de China en Xijiang.
La propaganda occidental invierte la realidad
El artículo de Business Insider afirma:
El gobierno de China ha culpado durante años a los uigures del terror, y dicen que el grupo está importando el extremismo islámico al Asia Central. Pero hay otra razón por la que Pekín quiere reprimir a los uigures en Xinjiang: la región es el hogar de algunos de los elementos más importantes de la Iniciativa Cinturón y Carretera (BRI), el proyecto comercial más importante de China.
Aquí, Business Insider deliberadamente invierte causa y efecto, alegando que China está tomando medidas enérgicas contra los uigures simplemente porque segmentos vitales de su proyecto BRI atraviesan Xinjiang, en lugar de tomar medidas enérgicas debido a que el terrorismo real amenaza a un corredor económico obviamente esencial.
Y como revela el propio mapa de Business Insider, el BRI de China atraviesa muchas otras regiones dentro de China y más allá, incluidas las regiones dominadas por comunidades musulmanas sin tensiones similares.
El terrorismo uigur es real
Está claro que Business Insider, HRW y otros están deliberadamente caracterizando mal las políticas de China en Xinjiang y tergiversan la causa raíz del extremismo uigur. Pero incluso el artículo en sí admite una amenaza de seguridad muy real, afirmando:
China ha acusado a los uigures militantes de ser terroristas e incitar a la violencia en todo el país al menos desde principios de la década de 2000, ya que muchos separatistas uigures abandonaron China para ir a combatir a lugares como Afganistán y Siria.
Voice of America (VOA), financiado y dirigido por el Departamento de Estado de los EE. UU. en un artículo titulado " Analistas: los jihadistas uigures en Siria podrían representar una amenaza ", admitiría (énfasis agregado):
Los analistas advierten que el grupo jihadista Turkistan Party (TIP) en el noroeste de Siria podría representar un peligro para la inestable provincia de Idlib en Siria, donde los esfuerzos continúan para mantener un frágil cese del fuego entre Turquía y Rusia con las fuerzas del régimen sirio y los diversos grupos rebeldes. El TIP declaró un emirato islámico en Idlib a fines de noviembre y se ha mantenido en gran medida fuera del radar de las autoridades y los medios de comunicación gracias a su bajo perfil. Fundado en 2008 en la región china del noroeste de Xinjiang, el TIP ha sido uno de los principales grupos extremistas en Siria desde el estallido de la guerra civil en el país en 2011. El TIP está compuesto principalmente por musulmanes uigures de China, pero en los últimos años también ha incluido otros combatientes yihadistas dentro de sus filas.
El artículo también admite que hasta 3.000 militantes pueden haber luchado por TIP en Siria y advirtió sobre la posibilidad de que estos militantes puedan transferir sus habilidades de lucha a China.
Tales admisiones, incluso de las operaciones oficiales de los medios de comunicación estatales de los Estados Unidos, ayudan a exponer la actual campaña de desinformación dirigida contra Beijing por supuesta "represión", y significa que los intereses occidentales, incluido el propio gobierno de los Estados Unidos, están al menos minando los esfuerzos legítimos de China contra el terrorismo.
Estados Unidos está fomentando intencionalmente la violencia en Xinjiang para perturbar el BRI
Pero las pistas incluso en el propio artículo de Business Insider revelan que el apoyo de Estados Unidos para socavar la seguridad interna china va mucho más allá de la mera desinformación.
Entre los “expertos” que Business Insider cita se encuentra Rushan Abbas, descrito en el artículo como "activista uigur en Virginia".
Lo que el artículo omite intencionalmente es que Abbas es en realidad una empleada y contratista del gobierno de los EE. UU., admitiendo en su propia biografía publicada por una consultora con sede en Washington DC para la que trabaja, que:
[Rushan Abbas] tiene una amplia experiencia trabajando con agencias del gobierno de EE. UU., Incluyendo Seguridad Nacional, Departamento de Defensa, Departamento de Estado, Departamento de Justicia y varias agencias de inteligencia de EE. UU.
La biografía también admite:
También trabajó en L-3, como consultora en la Bahía de Guantánamo, Cuba, apoyando la Operación Libertad Duradera durante 2002-2003 y como reportera de noticias en Radio Free Asia.
La Sra. Abbas también trabajó como lingüista y traductora para varias agencias federales, incluido el trabajo para el Departamento de Estado de los EE. UU. en la Bahía de Guantánamo, Cuba y para el Presidente George W. Bush y la ex Primera Dama Laura Bush.
Sus afirmaciones de que miembros de su familia fueron secuestrados debido a su "activismo" encajan en un patrón de "atropellos" fabricados a los derechos humanos utilizados para pintar objetivos de la coerción y la agresión de los EE. UU. de la peor manera posible.
Abbas es solo uno de los muchos que trabajan fuera de Washington DC para apoyar lo que es el separatismo uigur en Estados Unidos apoyado abiertamente en Xinjiang.
El National Endowment for Democracy (NED), una organización financiada por el gobierno de los EE. UU. dedicada a la interferencia política en todo el mundo, tiene una página completa dedicada a “Xinjiang / Turkestan del Este ”: Turkestán del Este es el estado en que los extremistas de Uyghur intentan esculpir el territorio reconocido por el Derecho Internacional como Chino.
Organizaciones subversivas que promueven abiertamente el separatismo, como el Congreso Mundial de Uigures (WUC) también mantienen oficinas en Washington DC y reciben dinero y apoyo directamente del gobierno de los Estados Unidos.
También un secreto mal guardado es la gran cantidad de armas, equipos, dinero y otros apoyos materiales proporcionados por los Estados Unidos a los terroristas que hacen la guerra contra el gobierno sirio, entre los que se incluyen los terroristas uigures admitidos por la propia VOA.
Desde Washington DC, a los campos de batalla del norte de Siria, a Xinjiang, Estados Unidos está alimentando abiertamente una gran amenaza terrorista que se presenta como un obstáculo importante para el BRI de China.
¿El público realmente tiene la intención de creer que una amenaza terrorista patrocinada por el estado dirigida a paralizar un corredor económico multimillonario no es razón suficiente para que Beijing lance una extensa campaña contra el terrorismo? Washington no solo está fomentando el terrorismo en el oeste de China, sino que está tratando de paralizar las operaciones de seguridad interna de Beijing en respuesta, aprovechando y abusando de la defensa de los derechos humanos y retratar a la víctima del terrorismo patrocinado por Estados Unidos como el culpable.
Que todo este contexto fue omitido intencionalmente por Business Insider, así como por Kenneth Roth, de Human Rights Watch, demuestra que Occidente está librando una guerra contra China y su expansión económica desde Siria a Xinjiang, y no solo en el ámbito de la información, sino también en el espacial.
* investigador y escritor geopolítico en Bangkok
