Vladimir Zelensky, héroe ruso

Dimitry Orlov

Durante su mandato como presidente de (lo que queda de) Ucrania, Zelensky ha destrozado Ucrania, pero ha logrado muchas cosas importantes... para Rusia. Aquí están sus principales logros sin ningún orden en particular:

• Al ser elegido con la promesa de poner fin a las hostilidades y luego proceder de inmediato a intensificar el conflicto en el este, comprometió por completo lo que quedaba de la democracia ucraniana. Demolió aún más el ámbito cívico de Ucrania al prohibir todos los medios públicos excepto un canal del gobierno, prohibiendo toda la oposición y todas las fuentes de noticias rusas y, de hecho, estableciendo una dictadura totalitaria.

• Al bombardear implacablemente a los civiles en las ahora regiones rusas de Donetsk y Lugansk, luego, en la primavera de 2022, amenazándolos con un ataque genocida, le dio a Rusia una razón sólida para iniciar la Operación Militar Especial: salvar vidas civiles. Al hacerlo, ayudó a expandir el territorio ruso en cuatro provincias muy valiosas (Donetsk, Lugansk, Zaporozhye y Kherson) y sentó las bases para la eventual adición de, entre otras, las regiones de Nikolaev, Odessa, Kharkov y Kiev.

• Despilfarró 150.000 millones de dólares en ayuda exterior (mucha de ella por el simple hecho de robarla), gastó una gran cantidad de equipo militar y municiones sin nada que mostrar, y mató a 350.000 soldados ucranianos, con posiblemente el doble de heridos.

• Redujo la población de su país a casi la mitad, parte de ella se mudó a Rusia, se convirtió en ciudadano ruso e integró productivamente a la población rusa mientras que el resto fue a la Unión Europea, convirtiéndose en una carga importante para los presupuestos de bienestar de los países de la UE.

• Al ordenar a las tropas ucranianas que bombardearan escuelas, guarderías, hospitales y edificios de apartamentos en regiones rusas universalmente reconocidas, como Belgorod, y al lanzar ataques con aviones no tripulados directamente contra el Kremlin, declaró que su gobierno era una organización terrorista, excluyendo cualquier posibilidad de obligar a Rusia a negociar una paz que no sería enteramente en sus propios términos.

• Demostró la superioridad de las armas y la técnica militar rusas sobre las de la OTAN, más recientemente con la destrucción por parte de Rusia de una de las baterías de misiles Patriot proporcionadas por EE.UU. Se ha demostrado que casi todo el equipo que Occidente ha podido proporcionar a los ucranianos es inferior a su contraparte rusa.

• Le dio al ejército ruso amplias oportunidades para perfeccionar sus técnicas para derrotar a las fuerzas de la OTAN, aventurándose en nuevas áreas de guerra con drones y vigilancia del campo de batalla desde satélites geoestacionarios. Sin duda, esto será muy útil tanto para oponerse a la OTAN como para impulsar futuras ventas de armas a naciones no occidentales que deseen estar libres de la opresión y la intromisión occidentales.

• Vendió algunas de las armas que recibió de los EE. UU. a los cárteles de la droga mexicanos, lo que dejó a los funcionarios estadounidenses sin otra opción que cerrar los ojos y fingir que esto no sucedió. Quizás también se verán obligados a mirar hacia otro lado a medida que estos cárteles hagan uso de estas armas para apoderarse de más y más ciudades y pueblos de EE. UU.

• Fue el anfitrión de muchos funcionarios occidentales de alto rango, a quienes, en su visita a Kiev, les obsequió lujosos regalos, como maletas con dinero de ayuda exterior que había lavado, que estos funcionarios luego llevaron a casa en el equipaje diplomático.

• Dio el ejemplo a otros judíos rusos cuya mala suerte los había llevado a terminar en Ucrania en lugar de en Rusia al reubicar a sus padres en un barrio elegante de Israel. Pero mantuvo a su esposa a su lado, donde ella hizo un buen trabajo desmoralizando a la población ucraniana al despilfarrar más dinero en una sola juerga de compras en Europa de lo que la mayoría de los ucranianos ven en varias vidas, todo pagado por los contribuyentes estadounidenses. También trabajó duro para engañar a los funcionarios occidentales haciéndolos aceptar al pie de la letra y repetir historias ridículas, como la de que las tropas rusas recibieron viagra, para que violaran mejor a las mujeres ucranianas.

• Zelensky a veces es imprudente; por ejemplo, lo atraparon nombrando agentes del Servicio de Seguridad Federal de Rusia (ex KGB) en puestos sensibles dentro del establecimiento de defensa ucraniano, aunque no está claro si lo que queda del poder judicial ucraniano será capaz de procesarlo.

• Uno de sus mayores logros fue colocar a EE. UU. y la OTAN en un zugzwang. Este es un término de ajedrez para una situación en la que un jugador tiene la opción de varios movimientos, todos los cuales conducen a la derrota. Estados Unidos y la OTAN pueden continuar apoyando a Ucrania o pueden dejar de apoyar a Ucrania; en cualquier caso, perderán.

• Quizás su mayor logro de todos fue ayudar a Rusia a alejarse de sus vecinos hostiles en Occidente y acercarse a países amigos en Asia, Medio Oriente, África y América Latina, cortando sus lazos económicos, financieros y culturales con Occidente y liberándose de influencias occidentales. Su apoyo inquebrantable a los nazis ucranianos, cuyos emblemas, insignias y eslóganes tienen el estilo de la Alemania nazi y cuyos héroes fueron colaboradores de los nazis, junto con el generoso apoyo que recibieron de Occidente, cuyos líderes optaron por hacer la vista gorda ante sus inclinaciones, consolidó en vista de los rusos, la visión de Occidente como su enemigo existencial: una entidad racista determinada a destruir Rusia pero demasiado débil y cobarde para hacer el trabajo por sí misma.

Todo esto plantea una pregunta: ¿A quién sirve Vladimir Zelensky?