Inteligencia

España, el escándalo de Pegasus: Jaque al chantaje del “CatalanGate” al Estado

Elespiadigital | Jueves 12 de mayo de 2022

Los independentistas catalanes no podrán salirse con la suya. La bajeza moral acaba saliendo a la luz, y aquellos que con ella actuaron van a quedar muy pronto retratados como lo que son: una escoria inmunda que no sabe ya cómo hacer para acabar de reventar España.

Juan Antonio de Castro

 



Juan Antonio de Castro

Los independentistas catalanes no podrán salirse con la suya. La bajeza moral acaba saliendo a la luz, y aquellos que con ella actuaron van a quedar muy pronto retratados como lo que son: una escoria inmunda que no sabe ya cómo hacer para acabar de reventar España.

Hace una semana publiqué en este medio la trama que se escondía detrás del chantaje de los golpistas catalanes al Estado, a través de la denuncia por los supuestos espionajes de que habrían sido víctimas a través de “Pegasus”. Ahí encontramos a “Citizen Lab” y a Elies Campos, uno de los principales protagonistas del informe de una organización globalista por excelencia, con sede en la Universidad de Toronto, en Canadá. También encontramos en el operativo que preparó esta operación, desde enero de 2021, a la ANC y a Omnium Cultural. No podemos dejar de señalar que “Citizen Lab” esta financiada por, entre otros: la “Open Society Foundation (OSF) de Soros, y las Fundaciones Ford y Mac Arthur. Además encontramos asimismo entre ellos a HIVOS, una tapadera de apoyo a “Citizen Lab” por parte del Fondo Nacional para la Democracia (NED) de los Estados Unidos, del Ministerio de Asuntos Exteriores de los Países Bajos, de la agencia de cooperación del Reino Unido (UKDFID), de la cooperación alemana (GTZ) y de la cooperación Sueca. Como puede verse, la lista incluye a algunos de los conocidos como “exportadores de la democracia” en las famosas revoluciones de color, así como en el intento de golpe independentista en Cataluña. A ellos se unió, en esta ocasión, “Amnesty International”, que viene asimismo recibiendo financiación del entramado de Soros y ha cooperado, en esta ocasión, en aspectos técnicos del informe e investigación generada.

La sumisión de nuestro presidente del gobierno a dicho chantaje llegó hace pocos días al súmmum con la destitución de la Directora del CNI, organismo intachable que no ha hecho otra cosa, en esta ocasión, que su deber que es protegernos de las amenazas a la seguridad del Estado. Es evidente que de un gobierno que se pliega a golpistas indultados no vamos a poder esperar nada, pero tampoco los españoles somos un pueblo que se deja pisotear. La verdad debe terminar saliendo a la luz.

Así es como un grupo de valientes se ha puesto en pié, y ha decidido enfrentarse a lo que este gobierno infame, ni quiere, ni es capaz de defender. Me estoy refiriendo al “Foro de Profesores”, un grupo de españoles, mayoritariamente de profesores, así como de profesionales de diversos ámbitos y de todas las tendencias políticas, nacido hace pocos años de la necesidad de crear una plataforma de discusión, apoyo mutuo y difusión de ideas de todos aquellos que tienen en común un compromiso con la unidad de España y respeto al Estado de Derecho . Un grupo que ha constatado como, en la defensa de ese compromiso, han visto sus esfuerzos comunicativos muy limitados por el aislamiento y el aparato propagandístico de los nacionalistas. El Foro sabe que aquellos que se empeñan en atacar el estado de derecho están muy organizados y orquestan su actuación para obtener el mayor impacto posible, y es por ello que el Foro trata de dar un paso hacia adelante para resolver esa falta de organización.

El Foro ha venido propiciando que ayer, 11 de mayo de 2022, seis compatriotas parlamentarios europeos del grupo Cs Europa – Renew Europe, dirigiesen una carta al Presidente de la Universidad de Toronto, al Director de la Munk School of Global Affairs and Public Policy, al Director de Citizen Lab y a otros directivos de esa universidad. En ella, y refiriéndose al informe de Citizen Lab, de 18 de abril de 2022, y al artículo que sobre ello se publicó en New Yorker, así como a las actividades del Parlamento Europeo, sobre el uso de Pegasus, y las iniciadas en España, los firmantes señalan las graves acusaciones hechas contra el Gobierno de España y basadas en el informe publicado por Citizen Lab, así como las declaraciones de algunos líderes secesionistas y autores del informe a los medios. Los firmantes consideran además que en base a declaraciones de expertos y periodistas, se cuestiona seriamente la ética e integridad en la investigación realizada por Citizen Lab en Cataluña. Por ello le piden a la Universidad de Toronto que aclare o sucedido y para ello responda a 32 preguntas muy concretas y académicamente impecables.

Esta iniciativa de ir directos al origen del problema, a la colaboración supuestamente oscura, en términos de ética e integridad, de una institución extranjera altamente considerada, constituye un paso importante para todos aquellos que hemos clamado siempre por la connivencia externa que existe en contra de los intereses de nuestro Estado.

En esencia, se pregunta en dicha carta: si el informe fue sometido a un proceso de revisión por pares (peer-review); sobre la posibilidad de replicar los resultados de la investigación por expertos independientes; sobre la existencia de posibles conflictos de intereses y si eso forma parte de los protocolos de ética en la investigación de dicha universidad; cómo se eligió al señor Elies Campo y si éste señaló o no existencia de conflicto de intereses con el Comité de Ética investigadora, cuando se le encargó el trabajo y donde se realizó el trabajo de campo en Cataluña; además se pregunta concretamente si, cuando se decidió que Elies Campo hiciera el trabajo de campo, sabían ya de antemano que estaba siendo monitoreado por los servicios secretos españoles, por implicación en diversas actividades secesionistas ilegales; se hace también referencia a la labor de análisis pericial sobre los móviles; como se tomó la decisión de enviar 4 de los 65 casos a la unidad técnica de Amnesty International (AI), al papel de Etienne Maynier en AI a este respecto; si Citizen Lab es capaz de distinguir ataques Pegasus de otros de distinto origen; asimismo se hace especial hincapié en el estatus contractual o de honorarios de los participantes en la investigación; la relación de Citizen Lab con Apple; si Citizen Lab o la Munsk School recibieron financiación externa alguna de alguna organización española desde el 2019; se apunta también a si algún partido político, como Junts per Catalunya, ERC o la CUP, u organizaciones como ANC u Omnium Cultural, participaron en el proceso de muestreo o en la redacción del informe; sobre si el Consejo de Ética investigadora sabía que dos dirigentes catalanes independentistas filtraban los mensajes sospechosos que Elies Campo le enviaba a Citizen Lab; se pregunta también si Elies Campo y John Scott-Raitton, que trabajaron en el informe final, en 2020, lo hicieron en colaboración con una agencia de comunicación americana, y si eso es así porqué lo hicieron, así como conocer el nombre de esa compañía; si los partidos u organizaciones antes mencionados hicieron presión sobre Citizen Lab para llamarle a todo esto el “CatalanGate”; si se planea iniciar investigación interna alguna respecto a la elaboración de este informe; finalmente se pregunta si los miembros de Citizen Lab estaban al tanto de de las alegaciones publicadas sobre la colaboración de los líderes secesionistas catalanes, con los servicios de seguridad Rusos, en momentos en los que se informó a los líderes independentistas catalanes que sus teléfonos estaban siendo monitoreados por España.

La carta termina recordándole a la Universidad de Toronto, que “una institución comprometida con los más altos estándares en investigación académica, transparencia y responsabilidad pública, como es la Universidad Toronto, no debería tener mayor problema en revelar la información requerida más arriba

Se trata de una carta impecable de todo punto de vista. Con el apoyo total del Foro de Profesores y la iniciativa de los firmantes Luis Garicano, Maite Pagazaurtundúa, Jordi Cañas, Susana Solís, Adrián Vázquez y Soraya Rodriguez se consigue, con absoluto rigor y sentido académico, que los autores de este montaje, que ha terminado en un nuevo chantaje de los secesionistas contra el Estado Español, comiencen a asumir sus responsabilidades. Ya es hora de que aquellos que, desde fuera de España, vienen actuando impunemente, a través de su injerencia en los asuntos internos de España, empiecen a mostrar ante el mundo lo supuestamente falaz de su rigor, en términos de ética e integridad, de sus actuaciones conniventes con secesionistas condenados en firme por su sumamente grave quebranto de la legalidad.

Ante la inacción y el silencio culpable del presidente del Gobierno, Pedro Sanchez, es la nación española, como suma de individuos que la integran, la que esta vez ha tomado la iniciativa de intervenir. Esta no será ni la primera ni la última vez que lo hace, porque defender a España, cuando un gobierno la traiciona, es cada vez más la responsabilidad de todos y cada uno de nosotros.

Fuente: Rebelión en la Granja