Los empleadores polacos se muestran preocupados por un posible éxodo de obreros ucranianos a Alemania, informó el periódico RzeczPospolita.
Según informó el medio, Berlín tiene previsto facilitar la obtención de visados de trabajo para los ciudadanos de los países no pertenecientes a la UE, algo que podría llevar a que alrededor del 59% de los trabajadores ucranianos apuesten por este país europeo en vez de ir a trabajar a Polonia.
"Es una enorme amenaza para la economía polaca", afirmó Krzysztof Inglot, director de la oficina de empleo Personnel Service.
Según advirtió Inglot, debido a esto, la escasez de personal en Polonia podría llegar a las 500.000 personas. El experto subrayó que esto afectaría el crecimiento económico del país y llevaría a la pérdida de la competitividad.
Asimismo, la falta de obreros ucranianos podría reducir un 10% la producción de bienes de consumo.
Por su parte, el presidente de la empresa Budimex, Dariusz Blocher, declaró al medio que alrededor del 25% de todos los obreros que trabajan en Polonia son ciudadanos ucranianos y bielorrusos y que, sin ellos, "la industria no será capaz de hacer frente [a sus compromisos]".
Según datos del Ministerio de Política Social de Ucrania, hasta 9 millones de ciudadanos ucranianos —o un 20% de la población— salen a trabajar al extranjero anualmente.