Martin Berger*
Martin Berger*
Las últimas dos semanas el Mediterráneo oriental podrían recordarle a un observador casual algún tipo de desfile militar, con miembros de la coalición liderada por Estados Unidos que traen un número cada vez mayor de activos militares a la región.
El número de buques de guerra de varias banderas enviadas como una demostración de fuerza en el Mediterráneo oriental ha aumentado a diario. Los buques de guerra del Grupo Marítimo 2 de la OTAN , incluidos HNLMS De Ruyter de la Royal Navy de los Países Bajos, Elli de Grecia , HMCS Ville de Québec de la Royal Canadian Navy, y cuatro destructores estadounidenses, USS Carney, USS Ross, USS Winston S Churchill y USS Bulkeley. Incluso el buque insignia de la Sexta Flota de la Armada de Estados Unidos, el USS Mount Whitney, hizo su aparición en la región junto con al menos tres de los submarinos nucleares multipropósito de la clase de Los Ángeles, uno de los cuales fue el USS Newport News, que anteriormente estaba estacionado en Gibraltar.
Aún más, a esta fuerza masiva se unió luego un grupo de ataque estadounidense, liderado por el portaviones USS Harry S. Truman, que trajo el crucero de misiles USS Normandy junto con varios destructores.
Francia también ha mantenido su fragata de clase FREMM Auvernia estacionada en el área. Más aún, el alemán FGS Augsburg atravesó el estrecho de Gibraltar y entró en el mar Mediterráneo el 21 de septiembre.
Mientras tanto, las fuentes de los medios corporativos están desesperados en su intento de persuadirnos de que un número sin precedentes de buques militares desplegados en el Mediterráneo oriental debe atribuirse al conflicto en curso en Siria. Argumentan que este es un medio de intimidación para disuadir a Damasco de organizar un "ataque químico" en Idlib por lo demás totalmente ilógico, como si hubiera una sola explicación viable de por qué las autoridades sirias incluso considerarían esa opción.
¿Pero es esta la única razón para una concentración tan urgente de las fuerzas armadas occidentales en el Mediterráneo oriental? ¿Cuál es la razón real detrás de un evento sin precedentes?
Hay que tener en cuenta el hecho de que el conflicto en Siria se ha estado librando durante años y se está acercando a su final. Para iniciar una transición a la vida pacífica y comenzar una discusión sobre los arreglos del país después de la guerra, el presidente Bashar al-Assad tiene que restablecer el control sobre la última gobernación que aún está ocupada por los islamistas radicales, Idlib. Las perspectivas de la solución pacífica del conflicto sirio y la situación en torno a Idlib se vieron muy facilitadas por el plan de acción conjunto acordado por el presidente de Rusia con su homólogo turco a mediados de septiembre.
Por lo tanto, Occidente no tiene un verdadero pretexto para llevar a cabo la concentración de sus fuerzas armadas en el Mediterráneo oriental, ya que no tiene forma de atribuir esta acumulación a la situación actual en Siria. Sin embargo, este proceso continúa. Al mismo tiempo, el Pentágono ha intensificado recientemente las negociaciones con Grecia para ampliar su presencia militar en el territorio de este país europeo.
¿Entonces de que se trata todo esto?
Un análisis cuidadoso de la situación en el Mediterráneo oriental muestra que, en un futuro próximo, puede surgir un nuevo conflicto en esta región que será mucho más violento que las hostilidades anteriores. En comparación, el conflicto sirio parecerá un acontecimiento menor. La fuerza impulsora detrás de esta lucha futura son los enormes depósitos de hidrocarburos del Mediterráneo oriental, que se cree que poseen la tercera reserva de gas natural más grande del mundo. Occidente, que efectivamente ha establecido un control estricto de más de la mitad de todos los depósitos de energía en el Golfo Pérsico, ha estado dispuesto a ir a la guerra en un intento por asegurar su control sobre el Mediterráneo oriental, pero no estaba seguro de qué tan sangrienta sería la futura batalla para los recursos que se iban a conseguir. Sin embargo, el reloj no se detiene ahora. ExxonMobil lanzará una misión de exploración en los campos de gas de Chipre, parte de su zona económica exclusiva. Además de eso, Total, Shell, Eni, Qatargas, Noble Enerji y Kogas han estado planeando comenzar la producción de gas en la región.
Como era de esperar, Turquía tampoco tiene la intención de sentarse y mirar ociosamente, ya que también ha aumentado dramáticamente su presencia militar en el Mediterráneo oriental, al tiempo que bloquea todos los intentos del Eni de Italia para comenzar a perforar, ya que Ankara argumentó que esta compañía estaba actuando en violación de sus derechos exclusivos. A su vez, Ankara planea iniciar la producción de gas en la plataforma por sí sola, ya que tiene su propio buque de perforación Fatih para ser asistido por una serie de otros buques contratados para trabajos de perforación y exploración. Es posible que el inicio de las perforaciones por parte de Turquía en las áreas en disputa, que ahora están bajo el control de las autoridades griegas en el sur de Chipre, pueda llevar a una rápida exacerbación de las hostilidades en la región.
El norte de Chipre también ha presentado reclamaciones en los campos en disputa debido a la asistencia de Turquía. Quizás esa sea la razón por la que las autoridades del sur de Chipre permitieron a Francia usar las bases aéreas y navales de la isla. Más aún, tanto Londres como Washington han establecido sus propias instalaciones militares en Chipre hace mucho tiempo, que siguen siendo plenamente operativas. Por lo tanto, no es sorprendente que en los periódicos griegos y grecochipriotas se comenten los preparativos de otoño en el Mediterráneo con consternación y predicciones de que se avecina una nueva guerra sangrienta en el horizonte. La principal preocupación de Atenas y Nicosia es la flota turca.
Siria también va a producir gas en su sección de la plataforma, ya que ya ha firmado contratos con productores de hidrocarburos rusos y chinos. Según el Servicio Geológico de los Estados Unidos, la plataforma siria puede contener hasta 700 mil millones de metros cúbicos de gas, que es dos veces la cantidad encontrada hasta ahora en el continente. Como el ministro de petróleo y recursos minerales de Siria, Ali Ghanem declaró, la producción de gas en la plataforma se lanzará a partir de 2019.
Hasta ahora, los únicos países que han comenzado a producir en la plataforma son Israel y Egipto. El proceso de concesión de licencias sigue frenando al Líbano, y también tiene una disputa con Israel sobre los derechos a la plataforma, por lo que sus perspectivas en esta carrera parecen sombrías.
Está claro que los principales jugadores internacionales compiten por los derechos exclusivos para la producción de gas en el Mediterráneo oriental, varios países que no tienen experiencia en este negocio intentarán obtener su propio pedazo de pastel. Esto hace que una situación ya impredecible sea aún más volátil.
Pero, por supuesto, la verdadera motivación para la exacerbación de las tensiones en el Medio Oriente y el Mediterráneo oriental es mucho más compleja que incluso esto. Existe una feroz competencia geopolítica entre las grandes potencias para el futuro de un nuevo orden mundial mucho más amplio.